Los vecinos y comerciantes de la barriada de Pere Garau, queremos mostrar con esta petición
nuestro total desacuerdo con la forma de proceder del autodenominado GOVERN DE LA GENT, el
Ayuntamiento de Palma, por no contar con la opinión de los residentes y trabajadores de la barriada y no darles voz.

Si bien, todos concordamos en hacer de Palma una ciudad más sostenible y cercana a sus
habitantes, la forma de ejecución del proyecto de peatonalización del eje que iría desde las Avenidas
hasta la barriada de Son Gotleu, en la forma que tiene previsto el Ayuntamiento supondría, de facto,
la muerte del último de los mercados tradicionales de Palma, en el que confluyen payeses de toda la
isla para vender sus productos autóctonos y de proximidad que potencian la corriente actual de slow food y alimentos km 0, y con ello la muerte de la idiosincrasia de la barriada, tal como han ido matando todos los mercados de Palma: mercado de San Fernando; mercado del Tenis; mercado del Camp Redó; galerías comerciales de la Plaza Mayor…

Baste enumerar algunos beneficios de mantener nuestros mercados:
1. El consumo de productos de cercanía ayuda a los negocios locales a subsistir y crea puestos de
trabajo.
2. Fomenta la economía local. Es una inversión para la economía de la zona, pues se queda en ella.
3. Se genera menos desperdicio de alimentos.
4. El producto es más fresco y, por lo tanto, más nutritivo.
5. Conlleva menos tiempo de desplazamiento.
6. Es un imán para los curiosos y turistas, que consideran los mercados locales como una atracción.
7. Favorece la diversificación de la agricultura local que conserva la diversidad genética y reduce la
dependencia de los monocultivos.
8. La demanda de producto local contribuye a mantener las zonas verdes y el suelo rural como tal.
9. Fomenta el concepto de "comunidad" y el sentimiento de pertenencia a la misma.

Por todo ello solicitamos al Ayuntamiento de Palma un plan ordenado que permita, al mismo tiempo
que se hace de nuestra ciudad un lugar más sostenible, conservar la idiosincrasia de nuestra
barriada.
No es posible peatonalizar la zona sin antes planificar qué ocurrirá y por donde discurrirá el tráfico rodado, como accederá el transporte público a la zona (en la actualidad hay varias líneas de
autobuses), y qué sucederá con las aproximadamente 500 plazas de aparcamiento en superficie que se perderán con la peatonalización de la zona.
¿Cómo llegarán los productores locales a sus puestos en el mercado?
¿Qué ocurrirá con los compradores que se desplazan a comprar en su vehículo dado el gran peso que deben acarrear? En el caso de una familia media de 4 miembros, una compra semanal puede
suponer cargar con más de 15 kg de alimentos por semana, si contamos carne, pescado, verdura,
hortaliza y frutas.
El barrio tiene una alta densidad de población y muchos de los edificios son antiguos y carecen de
aparcamientos privados, ¿qué harán las familias que tienen vehículo y ahora lo aparcan en la calle,
ya con muchísima dificultad?
Creemos que es PRIORITARIA la construcción de aparcamientos públicos y para residentes en la
zona, antes de acometer la peatonalización de ninguna de las fases previstas. Es por lo que rogamos  al Ayuntamiento que estudie la viabilidad y llevar a cabo dichas obras de construcción de
infraestructuras en la barriada para que no muera el único barrio del ensanche con una animada vida comercial.