Alejandro Giovanni López Ramírez fue detenido el pasado 4 de mayo por los municipales de Ixtlahuacán de los Membrillos, Jalisco, por no usar cubrebocas en la vía pública. Fue sometido por lo menos entre 10 policías, se lo llevaron detenido y al día siguiente lo reportaron muerto.

Su hermano, Christian, grabó lo ocurrido. El presidente municipal les pidió que pasaran por él a las 10:00 de la mañana a la comisaría. Cuando llegaron este les dijo que estaba muy grave en el hospital porque "se les había pasado la mano".

Giovanni fue torturado y asesinado. Murió por traumatismo craneoencefálico. Su cuerpo tenía varias lesiones, entre ellas, un balazo en la pierna. 

El presidente municipal, Eduardo Cervantes Aguilar, ofreció a la tía de Giovanni 200 mil pesos mexicanos para que no difundiera el vídeo, pero también los amenazó con matarlos si la grabación se daba a conocer. 

"Casi un mes después de lo sucedido y aún con miedo a las represalias, Christian exige justicia al afirmar que su hermano no tenía enemigos, era albañil y apenas había cumplido 30 años. Añade que ninguna autoridad ha hecho una indagatoria por el asesinato.

Si le sucede algo a él o a su familia hace responsable al jefe de la policía de Ixtlahuacán de los Membrillos, Manuel Becerra Santacruz; al presidente municipal, Eduardo Cervantes, y al gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro." informa el portal de LatinUs.

Exigimos a Manuel Becerra Santacruz, Enrique Alfaro, Gobernador de Jalisco, y a la Comisaría de Seguridad Pública de Jalisco que los policías involucrados seas despedidos inmediatamente y encarcelados. ¡No más impunidad!

¡Exigimos justicia para Giovanni y su familia! #JusticiaParaGiovanni