Desde la sociedad civil venezolana rechazamos que sigan existiendo personas privadas de libertad, sometidas a torturas y tratos crueles y degradantes, junto a sus familias, presos sin elementos de convicción que generen una verdadera imputación en sus causas, otros sin un juicio justo y siempre con un elemento en común, ser perseguidos por el régimen inconstitucional de Nicolás Maduro Moros. Son presos políticos, son presos de conciencia.

Dicha realidad constituye gravísimas violaciones a los derechos humanos, no solo se trata de privaciones ilegítimas a la libertad, sino que ha devenido en otras graves violaciones; su derecho a la vida en inminente riesgo y el derecho a la salud se viola constantemente en las prisiones venezolanas, no se presta la debida atención médica cuando es requerida por los privados ilegítimos de libertad.

Actualmente sufren patologías crónicas como consecuencia de las torturas sufridas, además del hacinamiento e insalubridad, inexistente suministro de agua potable, impedimento de recibir luz solar y realizar actividades físicad por largos períodos de aislamiento y desnutrición por falta de alimentos. Ante tan precarias condiciones de prisión no cuentan con los insumos necesarios para atender alguna emergencia.

En medio de tan pésimas condiciones, el panorama de una pandemia -agudizado frente al escenario de la Emergencia Humanitaria Compleja por la que atraviesa el país y las últimas directrices de inmovilización de las personas dentro de los principales estados de Venezuela-, se hace completamente cuesta arriba para los familiares de los presos políticos continuar atendiendo sus necesidades, ello podría generar los más terribles desenlaces puesto que son únicamente las familias quienes han asumido el suministro de agua potable, alimentos y medicamentos de los encarcelados injustamente, en virtud del absoluto abandono de las autoridades de sus responsabilidades de garantizar los derechos constitucionales de los privados de libertad.

Frente a esta situación, y en el entendido que cuando existen situaciones de salud son los mismos familiares quienes deben correr con los gastos que se requieran, exhortamos la intercesión de la:
Comisión Interamericana para los Derechos Humanos
Secretaria General de la Organización de
Estados Americanos.
Grupo de LIMA.
Unión Europea.
Parlamento Europeo
Alto Comisionado de los Derechos Humanos de la ONU

para que sean otorgadas medidas cautelares de índole humanitaria a los presos políticos de Venezuela, única manera de garantizar su vida, el resguardo de su integridad física y detener el detrimento de su salud.

Finalmente, alertamos sobre la agudización progresiva de personas
afectados por el Covid-19 que puede presentarse en días próximos y la evidente incapacidad del Estado de seguir protocolos que puedan frenar una situación de propagación inmediata, por el hacinamiento de todos los centros de reclusión del país.