Cualquier persona, en algún momento de nuestra vida, podemos ser usuarios de los servicios sociales. A todos nos gustaría estar bien atendidos en esos duros momentos que nos pueda tocar vivir, y que los equipos profesionales que nos atendieran tuviesen unas condiciones laborales dignas. En Navarra esta situación está muy lejos de la realidad en los servicios de intervención social, que están subcontratados por las distintas administraciones públicas con empresas privadas.

Las 2000 trabajadoras de las plantillas que atienden los distintos servicios públicos de atención a menores, familia, mujeres víctimas de violencia de género, personas en situación de vulnerabilidad y exclusión social, personas migrantes, personas en situación de desempleo, etc. llevan más de 10 años sin ver actualizados sus salarios, ya de por sí muy precarios. La subida del 12% del IPC durante estos años y la congelación salarial padecida, han hecho perder a cada trabajadora más de 15.000€. Todo ello sin tener en cuenta la ausencia de pluses como nocturnidad, turnicidad o antigüedad.

Con el objetivo de hacer frente a esta precariedad, de conseguir una regulación laboral para el sector y mejorar la calidad de estos servicios públicos esenciales, iniciamos las negociaciones con la patronal ANEIS en abril de 2019, donde el Gobierno de Navarra está presente como observador.

La negociación de este primer convenio sectorial está bloqueada. En la anterior legislatura (2015-2019), Gobierno de Navarra adoptó el compromiso de financiar el convenio sectorial, pero el Gobierno actual, liderado por María Chivite, se ha negado a hacerlo. La patronal por su parte no asume su responsabilidad, poniendo sobre la mesa exigencias que no figuran en ningún otro convenio sectorial, ni provincial ni estatal.

Los servicios sociales y el dinero público son de todos y todas, nuestro mayor tesoro, herramientas para la cohesión y la justicia social. La actual situación no es justa para las plantillas, las personas usuarias ni para sociedad en general, que pagamos nuestros impuestos. Tener unos servicios sociales de calidad y terminar con la precariedad está en nuestras manos. ¿Nos ayudas a conseguirlo?