Aunque cada día hay 30 casos nuevos de cáncer en Costa Rica,  los diputados del país discuten quitarle a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), más de ¢800 millones al año, de recursos que son usados actualmente para la atención de pacientes, la formación de profesionales, la compra de equipos y la educación en las comunidades. Estos recursos vienen de los impuestos al tabaco por la Ley 9028.

La Junta Directiva de la CCSS en pleno ha expresado su oposición ante la Comisión de Asuntos Económicos de la Asamblea y los directores fueron claros en presentar el estado de la situación real de la enfermedad y de los recursos: los casos del cáncer van en aumento en el país, la institución necesita aumentar cada año la inversión para el abordaje de la enfermedad, por lo que es inadecuado pensar que se pueda hacerlo con menos recursos cada vez.

El doctor Roberto Cervantes Barrantes, gerente general de la CCSS, asegura que todos los recursos son usados de inmediato o se reservan para proyectos que están en marcha en algún punto de planificación.

Con estos fondos se ha fortalecido el diagnóstico temprano de los cánceres más comunes en el país para dar mayor oportunidad de sobrevida o recuperación, entre ellos el de mama, de cérvix, de estómago, de próstata y piel.

Sin embargo, algunos fondos comprometidos no se presentan como ejecutados porque no han terminado su proceso de desarrollo por lo que se da dado a entender que no se usan, cuando ocurre lo contrario: están totalmente asignados a grandes compromisos que impactarán a los pacientes.

De los fondos asignados (¢70 mil millones) para próxima ejecución ¢47 mil millones están destinados a los siguientes proyectos:

- La reposición de los tomógrafos para los hospitales México, San Juan de Dios yCalderón Guardia  
- El centro conjunto de radioterapia donde se instalarán los aceleradores lineales para los hospitales San Juan de Dios, Nacional de Geriatría y Gerontología y el Nacional de Niños.
- La torre de hemato-oncología del Hospital Calderón Guardia para el estudio, diagnóstico y tratamiento de enfermedades benignas y malignas concernientes a las células y componentes sanguíneos.

“Es incorrecto decir que tenemos recursos ociosos cuando en realidad los tenemos reservados para grandes proyectos que impactarán positivamente el tratamiento de los pacientes”, dice el gerente general , haciendo un llamado a los diputados mantengan los fondos frescos donde se necesitan”.

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