A diario, quienes padecemos de Tinnitus severo o de difícil manejo, nos vemos expuestos a toda clase de discriminación por parte de las personas que no lo padecen, bien sea porque no existe una política pública seria de información para su prevención o entendimiento de la situación, sino porque al ser subjetivo en su mayoría de casos, existe una tendencia a no creerle a quienes lo padecemos.

El tinnitus de difícil manejo es una TORTURA que tenemos que padecer a diario los millones de personas que sufrimos de esta condición tan desafortunada. Este padecimiento es una verdadera desgracia, es de lo peor que le puede pasar a un ser humano. Por esta razón, declarar el tinnitus como una tortura que atenta contra los DDHH de la gente que lo tiene que enfrentar nos va a ayudar que los gobiernos, las instituciones de salud publicas y privadas, las farmacéuticas y la academia aumenten sus, hasta ahora, escuetos esfuerzos en la búsqueda de una cura o una terapia que nos ayude a eliminarlo o, por lo menos, a disminuirlo a tal punto que deje de torturarnos. Apóyanos con esta causa. Busquemos las firmas suficientes para decirle al mundo entero AQUÍ ESTAMOS!, y sufrimos cada día de nuestras vidas, ayúdennos por favor.