Las organizaciones, colectivas, grupos y personas firmantes queremos expresar nuestro apoyo a la construcción de las ciclovías de la Colonia Escandón y a la ciclovía Metropolitana que unirá por primera vez a Ciudad de México con la zona conurbada del Estado de México. Esta infraestructura urbana es indispensable para distribuir con justicia las calles de la ciudad, brindando espacio seguro a quienes decidimos movernos en vehículos no contaminantes como la bicicleta, patines, patineta y otros vehículos asistidos ligeros y de baja velocidad.

La recientemente aprobada Ley General de Movilidad y Seguridad Vial establece con total claridad la importancia de poner en el centro a las personas, antes que a los vehículos contemplando a todos los usuarios de las vías, para garantizar el derecho a la movilidad “en condiciones de seguridad vial, accesibilidad, eficiencia, sostenibilidad, calidad, inclusión e igualdad”, como a la letra establece el artículo 4 Constitucional.

Entre más personas podamos resolver nuestras necesidades de movilidad sin motor, tendremos mejor calidad del aire para todas las personas, menos ruido urbano, menos horas perdidas en la congestión vial, menos siniestros de tránsito, más personas haciendo ejercicio de forma cotidiana mejorando su salud y ahorrando en sus traslados. Más niños y niñas podrán adquirir el hábito saludable de la movilidad activa que nos ayude a detener la actual pandemia de obesidad y sobrepeso. Más personas podrán elegir con confianza una forma de movilidad activa y saludable, liberando espacio en el transporte público. Cada persona que pueda moverse de forma saludable, segura, sostenible y solidaria contribuye a la solución de los problemas de movilidad del resto de los usuarios de la calle y crea beneficios, ahorros y bienestar para la ciudad en su conjunto.

Llamamos a los quejosos a conocer nuestro nuevo marco legal, a superar sus prejuicios y miedos al respecto de esta infraestructura útil, necesaria, accesible que se está construyendo en todo el mundo por los múltiples beneficios ya mencionados; y a respetar el derecho que tenemos las personas que nos movemos en bicicleta a transitar sin miedo a ser atropellados. Las ciclovías no impiden a otros usuarios el acceso y uso de la vialidad, ni amenazan al comercio o el valor de las propiedades.

Llamamos a nuestras autoridades a continuar con estas obras necesarias, sin dejarse amedrentar por quienes de forma egoísta pretenden seguir usando las calles para su uso exclusivo y a veces hasta ilegal, estacionando sus vehículos privados en la vía pública en abierta violación a los reglamentos de tránsito. Llamamos a las personas legisladoras del Congreso de la Ciudad de México y del Estado de México a cumplir con su obligación de armonizar sus leyes locales con la Ley General de Movilidad y Seguridad Vial, que en este momento están en omisión legislativa.

Llamamos a todos los habitantes de la Zona Metropolitana del Valle de México a respetar a las personas que caminamos, a las que pedaleamos, a quienes usamos el transporte público: a todos y cada uno de nosotros nos esperan en casa y tenemos derecho a movernos con seguridad en nuestras calles. Comprar un coche no le da el derecho a nadie a atropellar a otro ser humano.