La Iglesia Anglicana de la República Bolivariana de Venezuela (Independiente de la Comunión Anglicana de Canterbury), manifiesta, denuncia y protesta públicamente el atropello, persecución e inquisición, orquestados tanto por las Diócesis de la Iglesia Católica Romana Venezolana como por actos bochornosos y vergonzosos, protagonizados por diáconos, sacerdotes y obispos, representantes del Estado Vaticano en Venezuela y en varias naciones hermanas. Por consiguiente que el Movimiento Antiguo Anglo-Católico a través de la Iglesia Anglicana Latino-Americana, presenta un saludo de paz y solicita a todos los cristianos de excelsa voluntad de los pueblos de la tierra como hermanos en la misma fe, solidaridad con esta causa que nos tiene al borde de una catástrofe humana-social, la vida de clérigos anglicanos independientes y de otras denominaciones en el planeta, está en grave peligro, la honra y verdad de ellos, son lesionadas desde los púlpitos romanos con actos desagradables y hechos injustos, gestados por sus voceros desde las parroquias romanas en cada jurisdicción donde como miserables y mezquinos hacen presencia.

IAL y MAAC, solicita al Papa Francisco (líder humano planetario de la Iglesia Católica Romana), mediar en el conflicto inquisidor y solucionar urgentemente el enfrentamiento, que desfavorece a clérigos y cristianos de fe que no son miembros activos y seguidores del Vaticano. Asesoramos e invitamos a cristianos, diáconos, sacerdotes, pastores y obispos creyentes en Jesucristo en el mundo (víctimas de injusticia e inquisición religiosa), acudir a la espada santa de Dios con oraciones, protestas, manifestaciones callejeras, ayunos, huelgas y rezos, buscar apoyo con organismos internacionales como el Tribunal Internacional de la Haya, Tribunal Justiciero de Bruselas y Parlamento Europeo (y otras instancias nacionales e internacionales), para que ellos ayuden en la defensa de los Derechos Humanos, Derechos de libre creencia, Derechos de libre asociación, Derechos de libertad en la fe que se profesa y Derecho a la libre organización religiosa de las personas humanas de todas las razas. También deben denunciar el hecho usando el derecho internacional y abogados honestos, para que los victimarios paguen indemnizaciones correspondientes por estas arbitrariedades contra los afectados en Venezuela y en el lugar donde se de este flagelo de muerte bajo cualquier denominación cristiana o no cristiana. 

La paz se consigue con la participación de toda la humanidad (seres iguales entre distintos y diferentes), con dignidad, bienestar igualitario dentro de equilibrio social-humano. Este debe reinar en cada ser vivo creado, gozando la vida con justicia, que privilegios y oportunidades estén en manos de todos los hombres (varones y mujeres), sin ningún tipo de excepción, la raza humana debe alcanzar la plena felicidad sin buscar mansiones o riquezas. Invitamos a todos los gobiernos de las naciones y pueblos de la tierra, la anulación definitiva y cancelación de una vez y para siempre, del cruel y maldito dictador llamado "Concordato entre Iglesia y Estado". Ningún gobierno, estado o nación, debe mantener o financiar la fe, porque esta es simplemente una expresión espiritual voluntaria de la conciencia del mortal terrícola humano y esta debe llegar al corazón y mente sin dádivas, para expresar con humildad y sin presiones: Amor, servicio y compasión. El concordato entre Iglesia y Estado, es responsable y culpable de la existencia, de vagos, mantenidos, haraganes y delincuentes, estos siguen robando oportunidades y privilegios desde sus oficinas y altares. El 95% de la humanidad está sufriendo con cadenas de muerte en pobreza y miseria por tal crueldad.

"Todos en la cama o todos en el suelo" sin creer que ellos o la contraparte son los escogidos. La mentira orquestada como los verdaderos es la culpable de injusticias, guerras y masacres. Los injustos y asesinos no heredarán el cielo de Dios aunque inventen fábulas de muerte o farsas de payasos.

Saludos y bendiciones,

Reverendísimo

+ LEONARDO MARIN-SAAVEDRA

Arzobispo Primado de IAL.

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