En el 2021, la Presa Allende en San Miguel de Allende, Guanajuato, empezó a verse invadida por lirio acuático. Esta especie de planta se reproduce a gran velocidad; hoy en día, a sólo dos años de que empezara esta propagación, ya son más de mil hectáreas de la presa que se encuentran contaminadas ¡Es decir, aproximadamente el 60% de toda la presa! 

El lirio cubre la superficie del agua hasta no dejar pasar la luz del sol, afectando toda la vida subacuática. Además, consume una parte significativa del oxígeno presente en el agua, poniendo en riesgo otras formas de vida que puedan encontrarse en este cuerpo de agua. 

Encima, el lirio consume una cantidad enorme de agua para mantenerse sano y provoca que el agua se evapore 3 veces más rápido, por lo que, el peligro más importante que implica la sobrepoblación desmedida de esta especie es que, en un corto tiempo, ¡puede llegar a secar la presa entera!

Se han intentado diferentes medidas desde la sociedad civil para rescatar Presa Allende pero, a pesar de campañas de limpieza donde al día se se llegaron a retirar hasta 150 toneladas de lirios; los esfuerzos no eran suficientes y el lirio volvía a crecer rápidamente. Esto afectó a cientos de personas que se dedicaban a la pesca. Familias enteras perdieron su ingreso de vida y, tristemente, mucha gente se vio obligada a migrar.

El gobierno municipal, a principios del año pasado, introdujo a la presa una máquina que remueve el lirio y lo desecha en los bancos secos de la presa. Pero esta máquina NO es suficiente. La máquina sólo saca 25 toneladas al día y su mantenimiento y combustible cuestan, aproximadamente, 400 mil pesos al mes. ¡Se necesitan al menos 50 máquinas para crear un verdadero impacto!

Tristemente, el gobierno federal no ha hecho nada aunque la presa es responsabilidad suya y no del gobierno municipal o estatal, ya que forma parte de la cuenca Lerma - Chapala - Santiago, la cual involucra a varios estados de la república y no sólo a Guanajuato.

El Art. 27 de la Constitución contiene un listado de las aguas que se consideran “propiedad de la Nación”, y por tanto de competencia federal. Entre esas aguas están las de las presas. La ley reglamentaria del Art. 27 de la Constitución en materia de esas aguas es la Ley de Aguas Nacionales que también regula los “bienes públicos inherentes a las aguas nacionales”, es decir la infraestructura pública asociada a las aguas nacionales, tal como la infraestructura de la presa. Por lo anterior, es claro que, la competencia respecto del agua como la presa que la contiene es federal, por conducto de la CONAGUA.

Aun cuando el agua de la presa haya sido otorgada en bloque al Estado o Municipio (para su administración), dicha agua no pierde su carácter de “propiedad de la Nación”, ni desaparece la competencia federal de la CONAGUA en tanto esa agua esté en la presa. La inacción negligente de la CONAGUA implica una violación al derecho humano al medio ambiente sano y al uso sustentable del agua.

Por otro lado, una acción clave para rescatar la presa es evitar que los desagües de San Miguel de Allende y las demás comunidades aledañas a la presa desalojen sus desechos directamente en el agua de la presa. Mientras el agua esté contaminada con desechos de viviendas e industriales, el lirio siempre encontrará los medios apropiados para seguirse propagando, ya que esta planta se alimenta de los contaminantes del agua. Gestionar apropiadamente el sistema de alcantarillado de la ciudad sí es responsabilidad directa de SAPASMA y del presidente municipal de San Miguel de Allende. 

Mientras tanto, la supervivencia de los ecosistemas que dependen de la Presa Allende se desmorona velozmente. No hay tiempo que perder para implementar al menos una de las soluciones que han dado resultados en otras partes del país. NECESITAMOS ACTUAR YA.

Es por eso que exigimos desde la sociedad civil a las autoridades locales, estatales y federales como a la CONAGUA, la CONANP, la SEMARNAT, al SAPASMA, al presidente municipal de San Miguel de Allende, Mauricio Trejo, y al gobernador del estado de guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez:

1. Que los gobiernos municipal y estatal apoyen a la sociedad civil en presionar a la CONAGUA para que cumpla con su responsabilidad constitucional de gestionar bien las aguas nacionales y, específicamente, el agua y la infraestructura de la Presa Allende.
2. Que, con el dinero que actualmente se está desperdiciando en una máquina ineficiente, se pueda instalar biodigestores que den gas para las estufas y los calentadores de las comunidades de la Presa, como se hizo en la Laguna de Yuriria.
3. Que la CONAGUA instale varias redes que ahorquen el lirio e impidan su desplazamiento a través del agua.
4. Que la CONANP desarrolle un área natural protegida en la zona de Los Picachos, al lado de la presa. Con esto se lograría que hubiera una mayor reglamentación medioambiental y un mayor cuidado ecosistémico de la zona en el futuro.
5. Y que la CONANP instruya a las personas que viven junto a la presa en la creación de artesanías con el lirio.
6. Que las autoridades (entre ellas, CONAGUA, SEMARNAT y SAPASMA) a) limpien y penalicen las aguas contaminadas que son vertidas a la Presa y a la cuenca Lerma - Chapala y b) que construyan nuevas plantas de tratamiento para el agua de la presa.

Por favor, firma y comparte esta petición para que las autoridades actuén en beneficio del medio ambiente de San Miguel Allende y de México. ¡¡NO MÁS INDIFERENCIA!!

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